Con la subida de hoy acumula el selectivo un 5.62% de subida esta semana, con lo que queda el saldo mensual en un -3.3%, pero tenemos al selectivo en la parte superior del canal bajista que le llevamos, que lejos quedan los días en los que el índice parecía querer perforar definitivamente el canal bajista, y ya comentábamos con su valor director, el Santander, que la vuelta estaba cerca.
Pues ya tenemos el Ibex en los 10.000.
Pues ya tenemos el Ibex en los 10.000.
Si tiramos unos fibos con máximos el 1 de Julio y mínimos el 12, tenemos una onda de 1.258 puntos, que tenemos representada en negro, y cuyo 61.8 % está curiosamente en los 10.055 puntos.
Si los vemos desde la onda secundaria con mínimos el 12 de Julio y máximos el 13, tenemos una onda de 441 puntos, la tenemos en rojo, y cuyo 161.8 % está en los 9.992 puntos, completando la segunda onda en los 10.167 puntos
Tenemos por lo tanto una zona de confluencia de niveles a los que tenemos que sumar la directriz bajista del canal que pasaría por los 10.130, por lo que podemos decir que el rango de 9.992 -10.167 es vital para proseguir la escalada a los máximos de Julio, pero ojo con las escapadas en falso a las que nos tiene acostumbrados, en este mes de Julio, ya nos han hecho por arriba y por la parte inferior del canal.
Por abajo no perder el fibo de los 9.890 en la segunda onda, pues se podría volver a los 9.500.
1 comentarios:
El tiempo se acaba y demócratas y republicanos siguen sin llegar a un acuerdo sobre el techo gasto. Mr. Obama se encargó de crear falsas expectativas la semana pasada y los halcones republicanos le han respondido abandonando las conversaciones con el presidente. Es alarmante que a una semana de la fecha límite no haya un mínimo atisbo de solución. La opinión de Wall Street es unánime: un default de EEUU sería devastador. Aunque nadie cree, incluido el bajista irredento Soros, que "dejen caer" a la primera economía del mundo. Pero a los republicanos, ultracapitalistas y a favor del libre mercado más radical, no les tembló la mano con Lehman Brothers. Precisamente lo que provoca las hecatombes en los mercados es lo inesperado, algo que nadie cree que puede pasar.
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